LA FÁBRICA DE CHOCOLATE

LA FÁBRICA DE CHOCOLATE



Hace unos días vimos en casa la película Charlie y la fabrica de Chocolate, la versiónde Tim Burton interpretada por Jhonny Deep. ¡Les fascinó! A mi también, por supuesto. Siempre es una delicia visual y transmite valores muy adecuados para los peques.

Os dejo el TRAILER por si alguien aun no la conoce.


Al verla se me ocurrió que si buscaba en la red seguro que encontraría algún sitio donde comprar las chocolatinas Wonka.  Y..... No me equivocaba, solo teclear en google y apareció una web en la que comprarlas, y además las entregaban con el correspondiente "Golden Ticket" que en la peli daba el derecho a la visita a la singular fábrica del Sr. Wonka.

A los niños les encantó, cuando al acompañarme a correos a recoger el paquete, descubrieron de que se trataba, alucinaron. Y más aun al descubrir el billete dorado.

 

Entonces decidí dar un aliciente adicional al regalo, y recordando que me habían comentado que se podía visitar una fábrica de chocolate e incluso había un museo, no lo dudamos y planificamos ir el primer fin de semana que pudiésemos. Y lo hicimos, la fábrica de chocolate Valor en Villajoyosa (Alicante) y su museo es un sitio genial para ir con niños, los trataron con mucho cariño y lo pasaron genial.

Les encantó ver como salían las tabletas y se desplazaban por la cinta transportadora hasta la máquina que las envolvía y luego las empaquetaban.

Lo mejor de todo es ese olor profundo a chocolate que te inundaba los sentidos, un verdadero placer.

Al terminar la visita disponían de una degustación de algunas variedades de sus chocolates y  aprovechamos para comprar unas cuantas chocolatinas tanto de las variedades de siempre como de los mas variados sabores.

Las visitas empiezan a las horas en punto y es conveniente ser puntuales sino se quiere tener que esperar a la siguiente hora.  ;-)






Trascribo las palabras de Miguel Ángel contando la visita:

"El sábado 7 de marzo visitamos la fábrica de chocolate Valor y estuvo genial. Casi nos quedamos sin ir por dos minutos de retraso. Pero lo mejor fue que nos dejaron entrar y a mi hermano y a mi nos dieron chocolate gratis. La verdad es que tenía estatuas hechas 100 % chocolate puro. Me sorprendió mucho la forma de la que se hacían las chocolatinas. Fue muy diver, no habría nada igual en todo el mundo"